martes, 10 de marzo de 2009

Siempre en estado de espera...






¿Por qué esperar y no salir a buscar?
¿Por qué murmurar si nadie te va a escuchar?
¿Por qué llorar si nada vas a solucionar?
¿Sólo escribir sin llegar a decir?
¿Por qué tener miedo si no sabes que vas a encontrar?
¿Por qué mirar al cielo si la respuesta sola no va a llegar?
¿Por qué suspirar por algo que no será realidad?
¿Sólo maldecir, pues no sabes ya como seguir?
¿Por qué demonios quieres sonreir si ya no deseas vivir?

una causa, mil y una consecuencias...

¿Qué raza es esta en la que el temor a las cosas relativamente más fáciles puede cegarte e impedirte discernir con claridad?
¿O quizás es la visión con demasiada claridad lo que nos hace echarnos atrás?

A veces quisiera ser una piedra, no un cristal bonito, una simple piedra entre miles de ellas, sin tener que pensar, sin tener que expresar, sin tener que sentir, sin tener que vivir...

Pero la vida no está para despediciarla tirándola por la ventana.
Soy un capullo con patas...

S. Quevedo

3 comentarios:

Littleclown dijo...

La vida está para sentirla, Sam...
no desaproveches ni un solo momento.
Puedes llegar a donde quieras..
un besico pelos!

Littleclown dijo...

Sam, sam, sam... todo lo que no te quieres tú, te queremos todos los demás. aiiis...

LuciAsensi dijo...

Qué poco me paso por este blog... tendré que pasarme más!
No conozco a Littleclown pero estoy muy de acuerdo con el/la.

Es cierto que sería más fácil ser una piedra cualquiera, sin sentiemientos, sin moral, sin necesidad de tomar decisiones, sin sufrimiento... pero, por ello, sin vida! Y yo prefiero vivir, sentir... aunque ello conlleve sufrir de vez en cuando. El hecho de poder sentirte alguna vez tan feliz que sientes que vas a explotar, el poder alguna vez llorar de felicidad, el poder alguna vez sentirte completamente en paz, el poder sentir el enamoramiento, reir a carcajadas y mil cosas más, comensan cualquier otra cosa!

Así que no se te pase nunca por la cabeza el cambiar esa maravillosa condición de humano por ser una simple piedra.
me compadezco de ellas por su ausencia de sentimientos y libertad y por no poder tener boca para sonreir ni brazos para abrazar.


Por cierto, te quiero!!

Un besito!